Hay días,
cuando te invade el dolor,
cuando te serpentea
por cada cm de tu cuerpo,
hundiéndose hasta el tuétano...
Esos días
en los q te haces dependiente,
aunque lo quieras negar,
aunque te aterrorice
esa simple y dolosa palabra: dependencia.
Hay días
en los que esa "normal independencia"
es un sueño del pasado.
Esos días, hay días de esos..
Sólo por hoy ,
una mueca sonriente
es el único clavo al que agarrarte.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
¿Quieres comentar esta entrada?